viernes, 8 de febrero de 2013

Un mundo feliz de Terriculous Suicidiey

El mundo desde mi ventana es de color verde. La malla para que no entren los bichitos es de ese color.
el día parece soleado, pero en verdad no lo se bien, solo vi el tiempo hoy en la mañana y decida que estaría seminublado.
Necesito salir de mi pieza, aquí no hago mas que vivir a través del Internet  esa es mi ventana al mundo sin malla y veo solo lo que quiero ver. Mi vida creo que marcha bien, hoy por lo menos me siento estable, no hay arriba y ni abajo, todo parejo, o sea, serio. Cuando mi vida marcha normal y sin cambios de humor, es seria. Yo soy seria, así que todo lo demás es serio.
Últimamente me ha dado por escuchar música orquestada y sin voces, salvo una que otra. Y tanta maravilla me ha dado ganas de entrar a teatro. Me gustan las artes escénicas. 
Por un mundo mas artístico y sensible; mas música  mas teatro, mas pintura, mas esculturas, mas reciclaje y mas reutlizaje, por un mundo mas creativo, menos televisión y por un mundo mejor en general, no mas milicia, no mas ejércitos, tanques, no mas armas y no mas guerras.
En el mundo desde mi ventana no habían guerras, ni armas, ni milicia. Había solo música  lectura y curiosidades. En el mundo de la televisión me volví a enterar de los milicos.
En el mundo de la televisión los milicos de mi país cantan canciones de masacre, de crueldad y amenazas. Y también los de otros países cantan esas cosas feas.
La verdad es... que yo aveces también tengo deseos de cantar esas canciones, pero del país militar. Porque la milicia es un país  ellos se mandan solos. Es por eso, que por un mundo feliz como el de Aldous Huxley, debemos cantar esas canciones.
Cantando así nos acercamos mas a la insensibilidad humana, a la enajenación, el camino mas facil a la felicidad mas falsa.

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